Reafirmamos nuestro compromiso de defender la necesaria intervención profesional de las abogadas y los abogados en cualquier situación que implique la aplicación del derecho.

El Colegio se opone enfáticamente al nuevo proyecto de divorcios administrativos que bajo el pretexto de simplificar los trámites ponen en riesgo muchos de los derechos de los contrayentes.

Una vez más, queda en evidencia el desconocimiento del sistema de nuestro Código Civil y Comercial en cuanto a la necesidad de considerar integralmente todos los efectos del divorcio para garantizar la protección de la parte más vulnerable.

El rol del abogado/a es insustituible en situaciones como la de un divorcio, y su ausencia podría dejar en desventaja a una de las partes.

Modernizar y simplificar los procedimientos no puede hacerse a costa de los derechos.

Creemos que la presencia del juez es insustituible para garantizar de la mejor manera los derechos en juego.